El presidente de la Mancomunidad de Aguas del Moncayo y alcalde de Ribaforada, Tirso Calvo, ha anunciado este miércoles que están analizando el agua del río Queiles para ver si contiene el protozoo que provocó el brote de gastroenteritis en Tarazona y que obligó a prohibir el agua de consumo de boca en varios municipios de la comarca del Moncayo.
Calvo ha recordado que la Mancomunidad de Aguas del Moncayo se abastece del agua del río Queiles para llenar el embalse de la Dehesa. Una vez allí, se trata para su consumo de boca y se suministra a los ocho municipios riberos que integran esta entidad (Corella, Murchante, Ablitas, Barillas, Monteagudo, Tulebras, Buñuel y Ribaforada).
Hasta ahora, el agua que se había distribuido a estas localidades para consumo de boca procedía del llenado del embalse efectuado a finales de junio y no se había visto afectada por estas alteraciones.
El problema es que, según ha asegurado el presidente de la Mancomunidad de Aguas del Moncayo, "estamos al límite, solo tenemos agua para esta semana". De ahí que Calvo haya mostrado su preocupación por la situación. “Hemos llenado una segunda balsa con agua del Queiles, pero hasta que no tengamos los resultados, que espero que sea esta misma semana, no sabemos si esa agua es apta para consumo”, ha explicado.
Calvo ha señalado que, en caso de que los análisis determinen que el agua del Queiles contiene el protozoo que provocó el brote de gastroenteritis en Tarazona, “avisaremos a la población para evitar que consuma agua de boca”, si bien ha añadido que “podríamos seguir suministrando a la industria y a otros usos”.
