Veinte personas evacuadas de sus casas en Tudela tras la crecida del Ebro

El nivel del río sigue descendiendo a su paso por la capital ribera y el caudal se sitúa ya por debajo de los 2.000 metros cúbicos por segundo

inundaciones ebro14
photo_camera Vecinos y comerciantes del Paseo de Pamplona se afanaban en limpiar sus garajes y establecimientos.

Una veintena de vecinos de distintas calles del Casco Antiguo de Tudela han sido realojados en el Hotel Bed4U debido a los daños que han ocasionado las inundaciones en sus viviendas. Unos daños que, principalmente, han afectado a las instalaciones de luz y calefacción de sus domicilios y ante la imposibilidad de restablecer los suministros se ha optado por trasladarlos a este hotel, situado en el polígono La Barrena, que ha puesto sus habitaciones a disposición de cualquier persona o familia que, por motivos de las inundaciones, tuvieran problemas para pernoctar en sus casas.   

El nivel del río Ebro a su paso por Tudela continúa descendiendo desde que el domingo a las dos de la tarde alcanzara su pico máximo con 2.709 metros cúbicos por segundos. A media tarde del lunes el sistema de medición instantánea de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) registraba un caudal por debajo de los 2.000 metros cúbicos por segundo, concretamente 1.960 metros cúbicos por segundo a las 18:00 horas.

De ahí que Tudela vaya recuperando poco a poco la normalidad después de un intenso fin de semana. De la veintena de calles anegadas por el agua, solo Verjas, Huerto del Rey, Miguel Servet y parte de San Julián continuaban esta mañana inundadas por la avenida extraordinaria del Ebro. Asimismo, continúan inundados el aparcamiento de tierra ubicado junto a las instalaciones deportivas de Ribotas y el paseo del Prado.

En lo que respecta al tráfico, esta mañana se ha restablecido la circulación por el puente del Ebro y el Paseo de Pamplona y al mediodía se ha abierto a la circulación de vehículos y al tránsito peatonal tanto el Paseo del Cristo como las calles Verjas, Portal y Fosal.

A lo largo de la jornada del lunes comerciantes y vecinos del Casco Antiguo de Tudela se han afanado en limpiar sus establecimientos, garajes y viviendas con el objetivo de recuperar el ritmo normal de vida, mientras los peritos de los seguros han realizado las primeras visitas a las zonas afectadas para comprobar los numerosos daños ocasionados por la magnitud de la riada.

Los vecinos de las calles del Casco Antiguo que se han visto afectadas por la riada han coincidido a la hora de señalar que no habían visto una riada de tal calibre, llegando el agua a superar el metro y medio de altura en algunas zonas.

Se inundaron por filtración, a través de la red de alcantarillado, los lugares habituales, las zonas bajas del Casco Antiguo próximas al río: calles Verjas, San Julián, Fuente del Obispo, Terraplén, Santiago, Portal, Huerto del Rey, La Parra, Miguel Servet, Patio, Arbollones, Tornamiras, de la Merced, las Vueltas, Horno de la Higuera, Hortelanos, paseo del Cristo, paseo de Pamplona, plaza San Francisco y plaza de la iglesia de la Magdalena.