- Recepción en el Ayuntamiento
- Encuentro en el Palacio de San Adrián
- Una jornada para el recuerdo en la Ribera
Tudela ha recibido este sábado 27 de septiembre la visita de los Reyes Felipe VI y Letizia, acompañados de la Princesa Leonor, en lo que ha sido la primera visita oficial de la heredera de la Corona a Navarra.
La jornada ha estado marcada por el calor popular, los saludos en la Plaza Vieja y un programa institucional que ha tenido dos escenarios principales: el Ayuntamiento y el Palacio del Marqués de San Adrián.
Recepción en el Ayuntamiento
Pasadas las 12 del mediodía, la comitiva real llegó a la Plaza Vieja, donde fue recibida por cientos de vecinos que no quisieron perderse la cita. “Ha sido emocionante ver a la Princesa tan de cerca, parecía muy cercana”, comentaba una vecina tras el saludo en la plaza.
En la entrada del Ayuntamiento les esperaba el alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, junto a la presidenta de Navarra, María Chivite, la ministra Elma Saiz y la delegada del Gobierno, Alicia Echeverría.

Tras acceder al salón de plenos, los Reyes y la Princesa conocieron el Arca de los Teruelos, pieza histórica utilizada en el pasado para la elección de cargos municipales.
En el despacho de Alcaldía, firmaron en el libro de honor y recibieron obsequios. El Ayuntamiento entregó a Felipe VI y a la Reina Letizia unas reproducciones de las veneras que lucen los ediles tudelanos desde el siglo XVII.
La Princesa Leonor recibió un pañuelo rojo bordado con su nombre y el escudo de la ciudad. “Es un símbolo muy querido en Tudela, y nos hacía especial ilusión entregárselo en su primera visita”, señaló Toquero.
Encuentro en el Palacio de San Adrián
Tras salir del consistorio, la familia real recorrió la Plaza Vieja hasta llegar al Palacio del Marqués de San Adrián, sede de la UNED Tudela.
Allí les recibieron el rector de la UNED, Ricardo Mairal, y el director del centro, Luis Fernández. “Es un honor abrir las puertas del palacio en un día tan señalado para Tudela”, explicó Fernández.
En el interior, los Reyes y la Princesa pudieron admirar las grisallas renacentistas que decoran la escalera noble y conocer la historia del edificio de la mano de sus actuales marqueses, José María Sanz-Magallón y Ana Duque de Estrada.
Como detalle anecdótico, la hija de una de las responsables de protocolo entregó a la familia real pulseras de hilo hechas a mano, gesto que fue recibido con sonrisas y agradecimientos.
Conversación con jóvenes tudelanos
Uno de los momentos más esperados fue el encuentro con una veintena de jóvenes tudelanos de distintos ámbitos: universitarios, estudiantes de secundaria y bachillerato, deportistas, artistas y emprendedores.

“Me sorprendió lo atentos que estuvieron a nuestras preguntas”, señaló Aitana Monzón, alumna de la UNED. Otro participante, Javier Morales, destacó que “fue un diálogo natural, nos escucharon con interés”.
Felipe VI puso en valor “el talento y la energía de la juventud de Tudela y la Ribera”, mientras que la Reina Letizia remarcó la importancia de “seguir apoyando la educación y el esfuerzo de quienes estudian y trabajan en esta tierra”.
La Princesa Leonor, por su parte, agradeció el recibimiento y aseguró: “Es un día que recordaré siempre, gracias por hacernos sentir como en casa”.
La visita de hoy ha supuesto un gesto simbólico al reforzar el vínculo histórico entre Tudela y el título de Príncipe y Princesa de Viana, creado en la ciudad en 1423.
Una jornada para el recuerdo en la Ribera
La visita concluyó cerca de las 14:30 horas con los saludos finales en el patio del palacio. La familia real se despidió entre aplausos de vecinos que aguardaban en las inmediaciones.
Para muchos tudelanos, uno de los momentos más emotivo fue la entrega del pañuelo rojo a la Princesa. “Es como darle un pedacito de nuestra fiesta y nuestra identidad”.

Con este acto, Tudela cierra una jornada que ha tenido relevancia institucional y un fuerte carácter ciudadano, reforzando la conexión de la ciudad y su merindad con la Corona de España.
En palabras del alcalde, Alejandro Toquero, “este día quedará grabado en la memoria de Tudela y de toda la Ribera”.