David Navarro, agricultor tudelano y vocal de la sección de jóvenes de la Junta Permanente de UAGN, ha mostrado su preocupación por la falta de relevo generacional en el sector agrícola.
“La media de edad en el campo está en torno a los 61 años, entonces además de preocuparnos por la modernización del sector, de ser competitivos y de conseguir cierta rentabilidad, hay que hacer frente al relevo generacional. Si los gobiernos quieren preocuparse por lo que sucede, deben apostar por el campo, incentivar y mejorar las explotaciones para que aumente su rentabilidad y así sea factible que haya más explotaciones dirigidas por jóvenes”, ha señalado.
Navarro ha apuntado que uno de los problemas del sector es la imagen que se tiene del agricultor. “La imagen del campo está muy distorsionada. Muchas personas tienen una imagen antigua, un poco caduca, de cómo era antes la agricultura, de cómo se producía…, cuando en realidad ahora es un sector puntero y estratégico. Además, vivimos en una sociedad en la que muchas personas se han desligado del campo, una sociedad muy urbana en la que muchas personas más allá de los alimentos que están en el supermercado, no llegan a plantearse cómo han llegado hasta ahí y desconocen completamente los problemas del sector”.
En otro orden de cosas, este agricultor tudelano ha vuelto a insistir en la importancia que tiene para la Ribera la ejecución de la segunda fase del Canal de Navarra y ha lamentado que todavía no haya un cronograma claro.
“Es una infraestructura fundamental y por mucho que se repita nunca es suficiente, realmente hace muchísima falta, ya no solo para el sector agrario, también para el consumo de boca”, ha asegurado Navarro, que ha añadido que “necesitamos que se defina un cronograma para poder avanzar en la construcción de la segunda fase del Canal de Navarra”.
“No sabemos cuándo se va a poder desarrollar. Las dos tuberías son absolutamente necesarias y no puede cambiarse ese plan. En la Ribera existe muchísima necesidad de agua, no hay más que ver el verano que hemos pasado. No es una cuestión de pedir agua para amontonarla, aquí falta agua, hay muchos sitios que no tienen y los sitios que aparecen en los mapas como regadío, podríamos denominarlos falsos regadíos, tienen muy poco para regar. Por tanto, si queremos que el sector mejore, que mejoren también los pueblos de la Ribera, la mejor solución es, sin duda, el Canal de Navarra”, ha concluido.
