- Un parque único con 120 hectáreas y 1,2 millones de m²
- El corazón: trigeneración con más del 80% de eficiencia
- Del vivero a las tractoras: un ecosistema en cadena
- Comunidad CAT: crecer sin sentirse solo
- Atracción y retención de talento
- De la crisis a la “temporada gloriosa”
- Servicios que marcan la diferencia
- Empresa y sociedad: un debate sin estereotipos
- Puertas abiertas
- Ejemplos de empresas instaladas
- Entrevista de RadioTudela 96.0 Fm a Isabel Vicente de Vera
La Ciudad Agroalimentaria de Tudela (CAT) es un parque empresarial pionero en Europa que concentra en un mismo espacio empresas productoras, auxiliares, logísticas e instituciones de apoyo.
Sobre el terreno, su propuesta se resume en dos pilares: infraestructuras energéticas comunes y comunidad empresarial. “Tenemos la capacidad de entregarle a los instalados allí servicios para que les hagan más competitivos: vapor, agua caliente, agua fría”, explica Isabel Vicente de Vera, coordinadora de la CAT, en una entrevista concedida a Radio Tudela 96.0FM.
Un parque único con 120 hectáreas y 1,2 millones de m²
La CAT ocupa 120 hectáreas (1.200.000 m²). De ellas, 65 hectáreas son parcelas en venta destinadas a empresas y 55 hectáreas se reservan a viales y zonas verdes. Su desarrollo supuso una inversión aproximada de 80 millones de euros, con el objetivo de crear masa crítica y competitividad en el sector agroalimentario y afines.
El corazón: trigeneración con más del 80% de eficiencia
El CIC (Central de Infraestructuras Comunes) es el “motor” del parque. Cuenta con una planta de trigeneración que produce vapor, agua caliente, agua fría y electricidad, con una eficiencia energética superior al 80%.
A través de un rack aéreo de 2 km, la energía térmica se distribuye a las empresas con parámetros industriales: vapor a ~12 bar, agua caliente a ~80 °C y agua fría en torno a +5/+5,5 °C. La electricidad se evacúa a red, mientras que el calor y el frío se consumen in situ, evitando inversiones duplicadas y reduciendo costes energéticos.
Además, la central dispone de calderas duales para respaldo, y el suministro frigorífico con CO₂ permite a los usuarios disponer de frío a -10 °C cuando sus procesos lo requieren, todo ello con servicios centralizados que escalan según necesidad.
“Unos pueden tener calefacción, otros pueden tener aire acondicionado, otros pueden utilizarlo para sus procesos productivos, depende de las necesidades de cada uno”, añadió Isabel, subrayando la flexibilidad de la infraestructura.
La CAT combina energía eficiente (vapor, agua caliente y fría, CO₂) y servicios compartidos para abaratar costes e impulsar la competitividad.
Del vivero a las tractoras: un ecosistema en cadena
La coordinadora describe un tejido que replica a Navarra: “hay empresas grandes, medianas y pequeñas”. En el parque conviven firmas tractoras como Urzante, Jamones Volatín o Aceites Sandúa con startups y emprendedores ubicados en viveros y en el centro de negocios. “Tenemos desde eso… una empresa que se llama Breath Free… harina de trigo sin gluten; … Kin Cosméticos; … Darwin… andadores; … Basanere, destilería artesanal. Es que tenemos un micro-sistema”, enumeró Isabel en la entrevista.
La proximidad de grandes compañías facilita la tracción de proveedores y el intercambio de conocimiento: “Son empresas que ya han pasado por ahí… y se alimentan y necesitan un montón de proveedores. La cercanía te puede llevar a que esa gran empresa sea tu cliente”, apuntó.
Comunidad CAT: crecer sin sentirse solo
Más allá de la energía, la CAT impulsa una comunidad profesional donde el apoyo entre iguales acelera la curva de aprendizaje: “Intentar que la gente vaya pudiendo dar pasos, pero no se sienta sola”.
El Centro de Negocios ofrece aulas para formación, salas para presentaciones y oficinas con buena imagen para citas comerciales mientras se consolida el proyecto: “La CAT te permite tener espacios… te da ese empaque”, explica.
Atracción y retención de talento
Isabel Vicente de Vera pone el foco en un reto compartido por muchas industrias: atraer y retener profesionales en la Ribera. “Hay que intentar que ese talento no se vaya… Podemos hacer que esto sea un núcleo industrial importante y una zona atractiva para vivir”, señala. La calidad de vida aparece como ventaja competitiva: “Es muy cómodo vivir en Tudela… aquí todo está cerca”.
De la crisis a la “temporada gloriosa”
La historia de la CAT no ha sido lineal. Nació en los años duros posteriores a 2008, con inversión contenida y prudencia inversora. “Le costó arrancar… ahora estamos en una temporada, digamos, gloriosa, en la que viene gente a por parcelas”, resume Isabel.
Datos recientes de su evolución avalan esa tendencia: el parque ha ido ocupando suelo y promoviendo nuevas naves, con la mirada puesta en mantener actividad en Tudela y su entorno.
Un modelo abierto al territorio
Cuando alguna empresa no encaja por dimensiones o plazos, el equipo de CAT deriva oportunidades a polígonos cercanos y coordina con ayuntamientos para retener actividad en la Ribera. “Si no puede ser en nuestro polígono, sea en el de al lado… lo importante es que se queden en la zona”, subraya la coordinadora.
Servicios que marcan la diferencia
La combinación de trigeneración de alta eficiencia y servicios centralizados permite a las compañías centrarse en su core sin inversiones redundantes: vapor a 12 bar, agua caliente a 80 °C, agua fría a ~5 °C, CO₂ para frío industrial y electricidad; todo ello distribuido por rack aéreo, con calderas duales de respaldo y producción de calor convencional.
Estos parámetros industriales aportan fiabilidad, ahorro y sostenibilidad frente a soluciones individuales.
Empresa y sociedad: un debate sin estereotipos
La entrevista también dejó una reflexión: “Se ha demonizado mucho al empresario… hay empresarios buenos y malos y hay trabajadores buenos y malos”. El mensaje apela a normalizar el crecimiento: del emprendedor al empresario sin etiquetas, con empleo cualificado y colaboración entre tamaños y sectores.
Puertas abiertas
Para quien quiera conocer la CAT, la invitación es directa: “Quien tenga una idea… estamos para ayudar desde la sociedad pública. Es muy fácil: tienen la web de CAT… ahí les aparece el contacto y el teléfono”. La instalación es visible desde la autovía y su equipo se ofrece a orientar a empresas y personas emprendedoras.
Ejemplos de empresas instaladas
- Urzante (aceite de oliva)
- Jamones Volatín
- Aceites Sandúa
- Breath Free (harina de trigo sin gluten)
- Kin Cosméticos (cosmética innovadora)
- Basanere (destilería artesanal)
La CAT es energía compartida y comunidad: un modelo que reduce costes, acelera proyectos y fija talento en la Ribera de Navarra.
Quince años después de su puesta en marcha, la Ciudad Agroalimentaria de Tudela ha demostrado ser un modelo industrial único que comparte energía, construye comunidad y retiene talento. La combinación de trigeneración eficiente, servicios comunes, espacios flexibles y red de apoyo atrae a nuevas empresas y fortalece a las existentes. La Ribera tiene, en la CAT, una herramienta tangible para competir y crecer “sin sentirse sola”.