Alcaldesas y cargos de UPN han exigido al Gobierno de Navarra la ejecución inmediata del proyecto de ampliación del puente en la carretera NA-660, que conecta Marcilla con Villafranca.
La formación regionalista denuncia que la actuación está paralizada desde la pasada legislatura y que sus representantes han sido sistemáticamente excluidos de las reuniones sobre esta infraestructura.
UPN critica la exclusión de sus alcaldes
Desde Unión del Pueblo Navarro consideran que la exclusión de sus alcaldes en encuentros clave responde únicamente a “motivos políticos”. Señalan como ejemplo la última reunión celebrada el pasado miércoles sobre el futuro del puente, en la que solo participaron representantes del PSN y del Departamento de Cohesión Territorial.
“Esta exclusión deliberada vuelve a poner de manifiesto el desprecio del Gobierno de Navarra hacia nuestros alcaldes”, aseguraron desde UPN. Recuerdan además que el proyecto fue anunciado en la legislatura pasada con una inversión prevista de tres millones de euros, pero que quedó paralizado “al estar los pueblos afectados gobernados por Navarra Suma”.
Una infraestructura clave para la seguridad vial
Los alcaldes y alcaldesas de la zona subrayan que el puente de la NA-660 es una infraestructura vital tanto para la comunicación entre localidades como para la seguridad vial. Por ello, exigen que el Ejecutivo foral actúe con imparcialidad y retome de inmediato una obra “necesaria y sin sesgos partidistas”.
UPN denuncia además que esta situación no es aislada. Citan otros episodios similares, como la visita oficial para anunciar la ampliación del IES Marqués de Villena de Marcilla, en la que tampoco se invitó a los alcaldes de la zona, todos ellos de UPN.
UPN reclama neutralidad institucional
La formación regionalista insiste en que las administraciones públicas deben regirse por el principio de neutralidad institucional. “No se puede gobernar para unos sí y para otros no”, apuntaron sus dirigentes, que consideran que este tipo de decisiones generan “ciudadanos de primera o de segunda según el color político de su alcalde”.
Por todo ello, UPN pide al Gobierno de Navarra que actúe con criterios objetivos, recupere el proyecto y garantice que la gestión de las infraestructuras responda al interés general y no a decisiones partidistas.