- Un sábado de calor y riesgo de tormentas
- Domingo de desplome térmico
- Adelanto del otoño en Navarra
- Perspectivas para la próxima semana
La Ribera de Navarra vive este sábado un contraste meteorológico marcado. El día comienza con calor veraniego, con temperaturas que alcanzarán los 30 grados y hasta 31 en Tudela.
Sin embargo, las nubes irán en aumento y durante la tarde se esperan tormentas fuertes que podrían ir acompañadas de granizo y rachas intensas de viento.
Un sábado de calor y riesgo de tormentas
Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la jornada se mantendrá inicialmente soleada en amplias zonas de la Ribera, aunque con nubosidad creciente desde el mediodía.Las máximas se sitúan hoy en torno a los 30 grados, reflejando todavía un ambiente plenamente veraniego.
En Tudela, se espera una máxima de 31 grados. Sin embargo, el calor no será la única nota del día, ya que durante la tarde se formarán chubascos tormentosos de carácter local, algunos de ellos intensos.
Los meteorólogos advierten de que, en apenas una hora, pueden acumularse más de 15 litros por metro cuadrado, lo que podría provocar incidencias puntuales en zonas urbanas y agrícolas.
Riesgo de granizo y fuertes rachas de viento
Las tormentas previstas en la Ribera este sábado no solo traerán agua. AEMET alerta de la posibilidad de granizo y de rachas de viento muy fuertes, que podrían superar los 60 kilómetros por hora en algunos momentos.
Este fenómeno puede afectar especialmente a viñedos y cultivos en plena campaña, así como al tránsito en carreteras comarcales. Se recomienda precaución en desplazamientos y evitar actividades al aire libre durante la tarde.
Domingo de desplome térmico
El cambio más destacado llegará mañana domingo. Tras el calor de hoy, las temperaturas se desplomarán hasta valores mucho más otoñales. En Tudela y en el conjunto de la Ribera, las máximas se quedarán en apenas 20 grados.
Este brusco descenso de 10 grados marcará el fin del ambiente veraniego y dará paso a una situación más propia del inicio del otoño, que oficialmente comenzará el próximo lunes.
La sensación térmica será fresca, sobre todo en las primeras horas del día y al caer la tarde, cuando el viento de componente norte reforzará la bajada de temperaturas.
Lluvias más persistentes
El domingo no solo traerá un ambiente más fresco. También se esperan lluvias más continuadas en la Ribera, con chubascos que podrán mantenerse durante buena parte de la jornada. Aunque no se descartan episodios intensos, se prevé una situación más estable que la de las tormentas de este sábado.
En términos agrícolas, la llegada de estas lluvias puede resultar beneficiosa para el campo tras varias semanas de calor intenso y escasas precipitaciones en la zona.
La Ribera afronta un fin de semana de contrastes: calor veraniego este sábado y un brusco desplome de temperaturas el domingo.
Adelanto del otoño en Navarra
El próximo lunes, 22 de septiembre, comenzará de manera oficial el otoño en el hemisferio norte. No obstante, en la Ribera el cambio se adelantará un día, ya que el domingo presentará temperaturas y condiciones típicamente otoñales.
Este adelanto ha sorprendido a muchos vecinos, acostumbrados a que septiembre mantenga todavía jornadas cálidas. En esta ocasión, el contraste será notable: de un sábado de 31 grados en Tudela se pasará a un domingo con apenas 20 grados.
Consejos de prevención
AEMET recomienda adoptar medidas de precaución frente a este cambio meteorológico. Entre ellas, revisar desagües para evitar inundaciones puntuales, asegurar objetos en balcones y terrazas ante posibles rachas de viento y prestar atención a las actualizaciones de los avisos oficiales.
Para la jornada del sábado, se aconseja evitar desplazamientos innecesarios en las horas de tormenta y proteger vehículos y enseres ante la posible caída de granizo.
Perspectivas para la próxima semana
De cara al lunes y martes, la previsión apunta a temperaturas suaves, con máximas que se mantendrán en torno a los 20-22 grados en la Ribera. Las lluvias irán remitiendo progresivamente y se espera un ambiente más estable, propio de la transición al otoño.
El contraste vivido este fin de semana marcará un antes y un después en el calendario climático de la zona, anticipando una estación que suele traer alternancia de lluvias y jornadas templadas.
Con este panorama, la Ribera de Navarra se despide del verano meteorológico con una jornada de calor y tormentas, para dar la bienvenida a un domingo otoñal de temperaturas más bajas.
