BARDENAS REALES

Finaliza la campaña de anillamiento de alimoches en Bardenas Reales 2022

La productividad de los alimoches bardeneros en 2022 ha sido de 0,85 pollos por territorio lo que supone una cifra superior a la de los dos años anteriores

Anillamiento de alimoches en Bardenas Reales
photo_camera Anillamiento de alimoches en Bardenas Reales

A lo largo del pasado mes de julio se han anillado 17 pollos de alimoche en el Parque Natural y Reserva de la Biosfera de Bardenas Reales de Navarra y su entorno.  Para el marcaje se ha contado con la colaboración del Grupo de Intervención en Altura de Navarra (GIAN). Desde 2010 estos trabajos se encuadran en la colaboración afianzada entre la Comunidad de Bardenas Reales e investigadores de la Estación Biológica de Doñana (Consejo superior de Investigaciones Científicas).

Desde el mes de marzo de 2022, biólogos del CSIC y personal de la Comunidad de Bardenas han realizado el seguimiento de la población de alimoches del Parque. Como resultado de ello se ha podido determinar la existencia de 19 territorios ocupados en ambas Bardenas (Blanca y Negra). Este número es similar al de 2021 por lo que se puede considerar que la población está estable.

La productividad de los alimoches bardeneros en 2022 ha sido de 0,85 pollos por territorio lo que supone una cifra superior a la de los dos años anteriores. La productividad ha sido mucho más alta en la Bardena Negra (1,10) que en la Blanca (0,25). Ello puede estar influenciado tanto por la mayor disponibilidad de alimento en la Negra, fundamentalmente por la reintroducción de conejo, PASAN del Muladar Mainate, así como por las menores molestias humanas. Se estima que al menos dos nidos de la Blanca han podido fracasar por intrusiones de visitantes que no respetan las normativas acerca de uso de senderos turísticos tanto peatonales como de BTT. 

Anillamiento de alimoches en Bardenas

El alimoche ha tenido históricamente en Bardenas Reales uno de sus más importantes feudos en España y en todo el continente europeo. Hasta 50 territorios ocupados existieron en los años 80 del siglo XX pero la drástica caída del conejo de monte debido a la neumonía hemorrágica supuso la pérdida de la principal fuente de alimento de la especie que se alimentaba de los cadáveres del lagomorfo.  Los alimoches bardeneros se vieron obligados a salir a buscar comida fuera de los límites del Parque donde la mortalidad por venenos y otros tóxicos y por accidentes en parques eólicos es muy alta.

En consecuencia, la disminución de la población ha sido drástica en las últimas décadas. No obstante, a partir de 2010 la población ha tendido a estabilizarse y hoy en día hay síntomas esperanzadores como la alta productividad y la importancia de nuevo creciente del conejo en la dieta.  La Comunidad de Bardenas trabaja en incrementar la disponibilidad de alimento para el alimoche dentro del parque mediante alimentación suplementaria y gestión de la población de conejo. Así mismo, ante la creciente presión turística, se establecen todos los años limitaciones a la presencia de personas en áreas sensibles de nidificación.