El Cine Moncayo de Tudela ha acogido este miércoles el homenaje a la cineasta madrileña Pilar Miró coincidiendo con el 25º aniversario de su muerte. Su hijo Gonzalo Miró ha participado en este acto de reconocimiento, que ha sido presidido por la reina Letizia.
El periodista ha destacado que su madre "intercaló el amor por el cine con la responsabilidad de ir derribando las barreras de la falta de libertad de la época que le tocó vivir. Lo hizo por ella, luchando por su propia libertad, pero la perspectiva del tiempo nos ha hecho ver que, a la vez, consiguió marcar el camino de mucha gente, de muchas mujeres que siguieron sus pasos".
En este sentido, ha añadido que "el primero que atraviesa el muro siempre sale lastimado. Vivió momentos extremadamente duros e injustos. Nos dejó cuando todo lo que estaba por venir era el reconocimiento del que yo disfruto hoy a título póstumo. Mi madre estaría muy orgullosa de sentir el amor incondicional de su hijo, el cariño y el aprecio de sus amigos, más de los que nunca imaginó, y el reconocimiento tanto del público como de los compañeros de esa profesión que tanto amó".
Asimismo, ha reconocido que no es fácil poner en orden los sentimientos que le remueven estos días que se cumplen 25 años desde su fallecimiento, “si bien la rabia y la pena de que no sea ella quien pudiera disfrutar en persona de todo este agradecimiento recibido durante todo este tiempo son inevitables”.
Gonzalo Miró ha recordado también que su madre “era muy pasional tanto en lo personal como en lo profesional, se entregaba en cuerpo y alma a cualquier cosa que hacía”.
Antes de Gonzalo Miró, ha tomado la palabra el director del Festival de Cine Ópera Prima, Luis Alegre, que subrayó la importancia que tuvo la figura de Pilar Miró en la cultura española. “Fue una mujer decisiva en la vida española del siglo XX, que revolucionó para bien todo lo que tocó" y una "pionera que abrió caminos y se colocó muy por encima de su tiempo. Fue modelo de lucha y coraje en una España rancia y machista".
Además, Alegre ha agradecido a la reina Letizia “su cariñosa complicidad con el festival, que aspira a la exaltación de Tudela como lugar que celebra la alegría de vivir, la cultura, el valor de nuestros cineastas españoles y el poderío de los clásicos de nuestro cine". "Se siente una de nosotros, una cinéfila convencida del poder del cine para hacernos mejores y enseñarnos cosas esenciales de la vida y la naturaleza humana".
En el homenaje también ha intervenido el presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, Fernando Méndez Leite. Lo ha hecho en nombre de otras figuras de la cultura española que le han acompañado en Tudela como Ana Belén, Víctor Manuel, Nativel Precisado y Mónica Randall.
Méndez Leite ha dicho que “Pilar Miró no se parecía en nada a ninguna mujer de su tiempo, cambió la cara al cine español. Pocas personas de mi generación provocaron la atención, interés y polémica que suscitó la autora de 'Gary Cooper, que estás en los cielos'. Su personalidad, el rastro que ha dejado entre sus contemporáneos, su paso por este mundo, sus amistades, sus rivalidades, sus amores entregados y sus idilios han perdurado en le recuerdo, dejando una huella tan marcada que eclipsa injustamente el verdadero legado de Pilar, su obra".
Al acto celebrado en el Cine Moncayo y presentado por la joven actriz Carla Quílez, además de la reina Letizia, han asistido el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, el alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, el presidente del Parlamento de Navarra, Unai Hualde, el delegado del Gobierno en Navarra, José Luis Arasti, y la consejera de Cultura y Deporte del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola.
Tras el homenaje se ha proyectado su película ‘El perro del hortelano’, ganadora de siete premios Goya, a doscientos estudiantes de los centros de enseñanza secundaria de Tudela (IES Benjamín de Tudela, IES Valle del Ebro, ETI, San Francisco Javier y Anunciata).
