La Asociación de Consumidores de Navarra Irache anima a los ciudadanos a comprar productos autóctonos y en comercios cercanos con el fin de apoyar la economía de la Comunidad. Este apoyo se presume más necesario que nunca en esta situación de Estado de Alarma que ha afectado a todos los sectores, entre ellos a los productores y a los comercios.
El 98% de las personas ven necesario apoyar al agricultor y ganadero navarro
Una encuesta encargada por esta Asociación antes de la llegada del coronavirus indicaba que el 98% de las personas creen necesario apoyar los productos producidos por agricultores y ganaderos en Navarra. Además, el 95% considera que el productor debe llevarse un mayor porcentaje del precio que se paga en la compra.
Algunos comercios y productores se reinventan con nuevos servicios al consumidor
En la actual situación muchos comercios están reiventándose y ofreciendo nuevos servicios a los consumidores navarros. La entrega a domicilio se ha extendido notablemente, también en establecimientos de barrio que antes solo comercializaban en el local. Además, algunos productores, ante la dificultad de la nueva situación y el cierre temporal de algunos de sus clientes, como bares o restaurantes y la acumulación de productos sin salida, están buscando un contacto más directo con el consumidor, de forma individual o a través de plataformas o asociaciones.
En la actual coyuntura, Irache considera fundamental apoyar a los productores y a los comercios navarros, especialmente el de pequeño tamaño y de cercanía, como forma de sostenimiento de un tejido comercial más local y de apoyo a la economía navarra. Además, este tipo de consumo es más sostenible y permite un mayor conocimiento por parte del consumidor del producto que adquiere.
Además, hay otras prácticas que se hacen muy recomendables en la situación de pandemia en la que nos encontramos.
Pagos con tarjetas o móvil que reducen el contacto
Sin duda, se han multiplicado los pagos con tarjetas. Más allá de la comodidad, el pago con tarjeta se ha generalizado como una manera de reducir el contacto y la posibilidad de contagio a través del dinero en efectivo. Las tarjetas que funcionan sin contacto y los medios de pago a través del móvil también permiten pagos más cómodos, seguros y responsables socialmente. También han ayudado las decisiones de algunos bancos, como la de aumentar el límite hasta 50 euros para no tener que teclear el número secreto en los pagos o la supresión de comisiones al sacar dinero en cajeros automáticos de otras entidades.
Comparar precios desde internet y valorar la cercanía del establecimiento
Una práctica que sigue siendo recomendable es comparar precios. Pero en esta coyuntura es mejor hacerlo, en la medida que se pueda, desde casa a través de internet y entre los comercios más cercanos. Sin duda, el ahorro es importante (y para algunos hogares puede que ahora más necesario que nunca) pero hay que combinarlo con la optimización del tiempo y del espacio dedicado a realizar la compra. Como hemos indicado, puede ser muy recomendable hacer la lista de la compra delante de la página web del establecimiento para decidir, con los precios delante, los productos precisos que se van a comprar.
Si se va a comprar a domicilio, valores posibles sustituciones y use listas de compra anteriores para ahorrar tiempo
Si va a comprar a domicilio, valore la opción de permitir la sustitución del producto que se ha elegido por otro similar, en caso de que no haya existencias en el establecimiento. Para ahorrar tiempo en la compra online el consumidor puede elegir un día a la semana para realizarla y utilizar las listas de la compra que ya elaboró anteriormente. También existe la posibilidad de comprar online y recoger el pedido en el establecimiento a la hora señalada.
El consumidor puede tener en cuenta las medidas adoptadas para evitar la propagación del virus
Es importante tener en cuenta las distintas medidas que están adoptando los establecimientos para evitar la propagación del virus. Éste también debe ser un elemento a sopesar a la hora de decidir el establecimiento en el que realizar la compra. Estos cambios, que conllevan su esfuerzo y coste para los comercios, repercuten en la salud del consumidor pero también son un signo de responsabilidad con la sociedad.
Responsabilidad e implicación social de las empresas
Además de las medidas específicar para evitar la propagación del virus, algunas empresas se están mostrando sensibles a la situación y a las dificultades que pueden atravesar los ciudadanos con otras decisiones. Ya hay turnos de compra preferentes para profesionales sanitarios o personas mayores, servicios a domicilio gratuitos, ventajas para colectivos más desfavorecidos, donaciones y aportaciones sociales, prácticas más sostenibles... Estos criterios también pueden ser válidos para que el consumidor los calibre, valore la posición que han adoptado las diferentes empresas y lo tome como otro elemento más a la hora de tomar sus decisiones de consumo.
