QUINTOS 2006

La fiesta de los quintos: una tradición que se mantiene viva en Murchante

Las y los quintos de 2006 disfrutaron de la celebración 'de su paso a la edad adulta' con una fiesta que comenzó muy temprano y duró todo el día
Los quintos de 2006 recorren la calles de Murchante
photo_camera Los quintos de 2006 recorren la calles de Murchante

Este pasado sábado, los quintos nacidos en el año 2006 fueron los protagonistas de Murchante.

En torno a una treintena de jóvenes celebraron 'su día' en una jornada llena de actividades que dio comienzo con una visita a la parroquia, como manda la tradición.

Grupo de quintos 2006 Murchante 2024

Seguidamente, no podía faltar el almuerzo ni la tradicional visita a las casas de las quintas de 2006

El grupo de jóvenes, acompañados por una charanga, recorrieron las calles de Murchante visitando y recogiendo de sus viviendas a las chicas nacidas en 2006.

Ya por la noche, subieron al "quesito", uno de los monumentos por excelencia en las fiestas Murchantinas, donde bailaron la popular "Quesada".

Para finalizar la jornada, bajaron todos juntos desde la calle Mayor hasta la plaza, donde disfrutaron de un espectáculo de fuegos artificiales y una cena.

Un día para recordar

El día de los quintos es una fiesta muy especial para los jóvenes que se celebra en Murchante y en la mayoría de los pueblos de La Ribera.

La fiesta de los quintos conmemora el paso a la edad adulta.

Antiguamente, cuando el servicio militar era obligatorio, esta fiesta servía de despedida para los jóvenes 'llamados a filas'.

En aquel entonces se visitaban las casas de las quintas -las jóvenes del pueblo que cumplían la misma edad-, para regalarles flores y dulces con la esperanza de que al regreso de los muchachos al pueblo, pudiera formalizarse algún noviazgo.

En la actualidad, el servicio militar obligatorio en España ya no existe, pero la fiesta de los quintos se sigue celebrando en muchos lugares como una tradición cultural.

Aunque el significado original de la fiesta ha cambiado, sigue siendo una ocasión para que los jóvenes, que durante ese año cumplen 18 años, se diviertan y celebren su paso a la edad adulta.

En definitiva, se trata de un día lleno de alegría, tradición y compañerismo, que los quintos recordarán durante toda su vida.