IGLESIA NAVARRA

Monseñor Roselló asume el cargo de obispo en la diócesis de Tudela

La ceremonia tuvo lugar este pasado domingo 28 de enero en la Catedral de Santa María
El arzobispo Mons. Florencio Roselló ha tomado posesión de la sede episcopal de Tudela. Foto Facebook ParroquiasTudela
photo_camera El arzobispo Mons. Florencio Roselló ha tomado posesión de la sede episcopal de Tudela. Foto Facebook ParroquiasTudela

Este pasado fin de semana se llevó a cabo la toma de posesión de Monseñor Florencio Roselló Avellanas como Arzobispo de Pamplona y Obispo de Tudela.

El  sábado, 27 de enero, en la Catedral de Santa María la Real de Pamplona, tuvo lugar la ceremonia de ordenación y toma de posesión de Mons. Roselló como Arzobispo de Pamplona y el domingo 28 de enero, fue el momento de celebrar en Tudela, su nombramiento como nuevo obispo de la ciudad.

Ambas ceremonias, congregaron a fieles y autoridades eclesiásticas y civiles, y se realizaron según la liturgia sagrada, destacando la imposición de manos y la plegaria de ordenación como momentos centrales.

El domingo 28, Mons. Florencio Roselló llegó minutos antes de las once de la mañana a la Catedral de Tudela, acompañado por los dos Vicarios Generales, Carlos Ayerra y Miguel Larrambebere. A la puerta de la Catedral fueron recibidos por el Deán, Sergio Álava, los canónigos, el alcalde de la ciudad, Alejandro Toquero, concejales y mandos de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

Don Florencio se dirigió a la capilla de Santa Ana para rezar ante el Sagrario y posteriormente a la sacristía para revestirse. De allí salió en procesión hasta el altar mayor, donde se celebró la Eucaristía de la toma de posesión.

Don Carlos Ayerra fue el encargado de leer la bula del Papa Francisco con el nombramiento de Roselló como obispo de Tudela. En ese momento, las campanas de la Catedral comenzaron a repicar. Un grupo de fieles, en representación del pueblo de Dios, subió al altar para felicitar al nuevo Obispo de Tudela.

En la homilía, don Florencio explicó a los presentes que esa primera celebración como Obispo la recordaría siempre. De igual modo, reconoció que era la primera vez que estaba en la Catedral de Tudela, pero que ya le había ganado el corazón, por su belleza y por tener como titular a Santa María la Mayor, titular también de la parroquia de su pueblo, Alcorisa.

También pidió a los fieles que le ayudaran a ser Obispo, por lo que les animó a que le hablasen, escribiesen y contaran con él. “Quiero conocer a sus sacerdotes, a sus consagrados, a sus comunidades, a los laicos, y a los que no creen y no vienen a misa… La calle es para todos y allí nos encontramos”, subrayó.