Ecologistas en Acción de Navarra ha expresado su "preocupación" y ha señalado los diversos "aspectos negativos y peligrosos" que conlleva el proyecto de ampliación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAP) de Tudela.
Residuos deben tratarse donde se generan
Uno de los puntos de preocupación es el transporte de los residuos desde otras zonas de Navarra hasta Tudela, generando emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes que podrían agravar el cambio climático y la calidad del aire.
Este proyecto se presenta como una mejora de lo que actualmente se está haciendo con los lodos de Navarra que no se tratan en Arazuri, llevándolos a Pina de Ebro. "Pero no es del todo satisfactorio", han indicado desde el colectivo ecologista.
"Los residuos deben tratarse donde se generan, porque al transportarlos se generan emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes, que pueden agravar problemas como el cambio climático o el ozono troposférico", han añadido.
La ubicación no es la idónea
Además, según Ecologistas en Acción, la ubicación elegida para el tratamiento de los lodos, junto al río Ebro y en zonas de cultivo de alta productividad, plantea riesgos ambientales significativos.
La posibilidad de contaminación del cauce del río Ebro y la pérdida de suelo agrícola de calidad son aspectos que no pueden ser pasados por alto.
"Es negativo el lugar elegido para tratar los lodos y hacer la biometanización, junto al río Ebro, en zona inundable, en mitad de tierras de cultivo de alta productividad", han manifestado.
"A parte de los problemas que pueden existir en la calidad de las aguas del Ebro no podemos perder suelo agrícola tan rico y fértil", han indicado.
Además, han advertido que al estar proyectada a pocos metros de un río caudaloso, en caso de crecida o fallo eléctrico, pueden verterse al suelo y al Ebro materiales no tratados que contengan contaminantes (medicamentos, compuestos orgánicos...).
Destino final del digestato
Ecologistas en Acción también ha expresado su inquietud por el destino final del digestato. "Vemos con mucha preocupación que ese residuo vaya a aplicarse en terreno de cultivo, no es un simple abono", han recordado.
"Sin un control exhaustivo y riguroso pueden ir al campo sustancias tóxicas como metales pesados, compuestos orgánicos o agravar la mala situación de nuestra zona aumentando los niveles de nitratos", han alertado.
Desde Ecologistas, si bien se reconoce la necesidad de mejorar la depuración de las aguas vertidas al río Ebro y de minimizar los problemas de olores, rechazan categóricamente el tratamiento de lodos de otras zonas en Tudela.
"Deberían diseñarse y construirse plantas más pequeñas para no volver a caer en el mismo problema de una concepción antigua, que centraliza todos los lodos de Navarra únicamente en dos plantas", han explicado.
