En la mañana del día 20 de noviembre, la Guardia Civil de Tarazona recibió un aviso mediante el que un ciudadano alertaba de la presencia de un turismo, con síntomas de encontrarse sustraído, en el interior de una finca agrícola de su propiedad ubicada en este término municipal.
Ante este hecho fueron alertadas dos patrullas de seguridad ciudadana de Tarazona y Vera de Moncayo que se trasladaron al lugar, entrevistándose con el propietario de las instalaciones quién les indicó donde se encontraba el vehículo, con evidencias claras de haber sido sustraído, así como que a su llegada a la finca había encontrado la puerta principal violentada y abierta, sospechando que había sido víctima de algún ilícito y que al verse sorprendidos por su presencia, los autores habrían abandonado el lugar por una puerta distinta.
Por estos motivos los agentes realizaron una inspección a las instalaciones, comprobando que había herramientas y otros materiales que se encontraban fuera de lugar, agrupadas y dispuestas para ser sustraídas. Igualmente comprobaron como una puerta secundaria de esta nave había sido abierta desde el interior, encontrándose indicios de que varias personas habrían abandonado la instalación por ese lugar.
Ante la posibilidad de que los posibles autores pudieran encontrarse todavía en las proximidades de la finca, la Guardia Civil junto a una patrulla de la Policía Local de Tarazona que, igualmente, se encontraba en el lugar establecieron un dispositivo de búsqueda que dio como resultado la localización, una hora más tarde, de dos jóvenes por la patrulla de la Policía Local quienes al ser preguntados por los motivos de su presencia en la zona y ante las respuestas incongruentes, así como la apariencia desaliñada, con restos de grasa en ropa y manos, arañazos y restos de arbustos similares a los que se encontraban próximos a la zona de huida, se procedió a su detención.
A los detenidos, dos varones, uno de ellos menor de edad, y vecinos de Tarazona, se les imputa un delito de robo de uso de vehículo a motor y otro de robo con fuerza en grado de tentativa. El menor fue puesto en libertad bajo la tutela de sus progenitores y a disposición de la Fiscalía de Menores, pasando a disposición judicial el mayor de edad tras la instrucción de las correspondientes diligencias.
