- Una victoria que vale todo el esfuerzo
- Primeros paso en el Club Ciclista Turiaso
- Escalador con futuro
Con solo 19 años, Unai Ramos Murillo (24-9-2005) ha irrumpido con fuerza en el pelotón amateur nacional y se perfila como una de las grandes promesas del ciclismo navarro. Este joven tudelano, estudiante de Enfermería y miembro del equipo Finisher, está protagonizando una temporada brillante en la categoría Sub-23 que le permite soñar en grande: recientemente se ha coronado campeón de la Vuelta a Navarra y ha conseguido la medalla de plata en el Campeonato de España Contrarreloj.
Una victoria que vale todo el esfuerzo
"La victoria en la Vuelta a Navarra significa todo. Ves un resultado al trabajo de meses, todo el esfuerzo recompensado", explica Unai, que se impuso tras un dominio incontestable en las dos últimas etapas. "Tanto yo como el equipo sabíamos desde el primer momento que estaba para ganarla", afirma.
Apenas un mes después, volvió a subir al podio nacional con una medalla de plata en la contrarreloj del Campeonato de España. "Iba a por el oro, pero la plata es un buen resultado. Aunque sabe un poco agridulce por la forma en la que el otro compañero ganó", reconoce. "Hice lo que pude con lo que tenía en las piernas, lo di todo y acabé contento con el resultado".
Primeros paso en el Club Ciclista Turiaso
Su historia es, como él mismo dice, la de alguien que "no empecé tan pronto, pero sí en el momento justo". Fue durante la pandemia, cuando los partidos de fútbol se cambiaron por paseos en bici de montaña por Santa Quiteria o Barcelosa. "La bicicleta me hacía más ilusión y al final fue esa ilusión la que me hizo cambiar". El primer paso serio lo dio en el Club Ciclista Turiaso de Tarazona, al que llegó de la mano de su presidente David García. Luego pasó al Club Ciclista Villavés, y después, al Finisher, el filial del equipo profesional Kern Pharma.
Los grandes resultados no llegaron hasta este año. "En juveniles, por mucho que ganes, no puedes decir que te vas a dedicar a esto", afirma con sensatez. "Pero después de los buenos resultados de este año, ya te lo vas replanteando y crees que esto puede ser finalmente tu trabajo", añade.
Compatibiliza su carrera deportiva con los estudios de Enfermería, una combinación exigente que requiere organización y sacrificio. Durante el primer año y medio de carrera acudía a clase por las mañanas y entrenaba por las tardes, pero en los últimos meses ha invertido la rutina: entrena por las mañanas y asiste a clase o estudia por las tardes. Unai asume con naturalidad las renuncias que exige su pasión: “Al final, mientras tus amigos salen, tú descansas y a la mañana siguiente vas a entrenar. Lo haces con gusto, porque es lo que te gusta hacer”.
Escalador con futuro
Se define como un ciclista escalador. "En la montaña es donde mejor me defiendo, aunque también me va bien el llano". Su progresión ha sido rápida y firme, y en su camino ha encontrado referentes cercanos: Unai y Hugo Aznar, los ciclistas de Cortes que ya militan en el equipo profesional Kern Pharma. "Siempre me han ayudado mucho desde que entré en el Finisher. Me han aconsejado sobre lo que hacer y cómo mejorar. Les tengo mucho que agradecer".
Aunque el sueño del profesionalismo parece cada vez más cercano, Unai prefiere mantener los pies en el suelo. “Ojalá estar el año que viene con ellos, pero de momento no se sabe nada".
Cuando se le pregunta qué significaría para él cumplir el sueño ciclista —disputar una gran vuelta, firmar con un equipo World Tour, ganar una etapa...— admite que “por ahora lo ve todo como un sueño y un poco lejano. Prefiero ir dando pasos poco a poco, porque si te pones un objetivo muy alto, igual te frustras al no conseguirlo. En este momento pienso en pasar al profesionalismo y ya después ir poco a poco, y que sea lo que Dios quiera”.