- Una tarde de jotas, emoción y compañerismo en Buñuel
- Una rondalla de lujo acompañó las interpretaciones
- Murchante será la sede del festival en 2026
- Actuación conjunta, obsequios y merienda para cerrar el evento
- Un festival que pone en valor la tradición oral y el legado musical
El pabellón municipal de Buñuel acogió este 14 de junio el XXII Festival de Joteros y Joteras Veteranos, una cita que reunió a más de 40 intérpretes mayores de 60 años procedentes de distintas localidades de Navarra, La Rioja y Aragón.
Una tarde de jotas, emoción y compañerismo en Buñuel
El festival, que no tiene carácter competitivo, ofreció un espectáculo de más de dos horas en las que el público disfrutó de un repertorio íntegramente dedicado a la jota navarra.
Cada participante, joteros y joteras con décadas de experiencia, interpretó dos jotas: una en solitario y otra a dúo, según su modalidad habitual.
La organización corrió a cargo de la jotera María Herrera, directora de la Escuela de Jotas de Buñuel, junto con el Ayuntamiento.
La presentación del acto estuvo en manos de Carla López Cillero, conocida por su trabajo en Navarra Televisión y alumna de la propia escuela.

Una rondalla de lujo acompañó las interpretaciones
El acompañamiento musical fue realizado por una rondalla compuesta por músicos de distintas localidades: Ainara Martínez de Castejón y Luis López de Buñuel a las guitarras, Sergio Borja de Ribaforada a la bandurria y Manolo Fernández de Rincón de Soto al laúd. Su labor fue clave para el lucimiento de las jotas interpretadas.
Una fiesta dedicada a la jota navarra en estado puro, donde lo importante no es competir, sino compartir.
Murchante será la sede del festival en 2026
Como es tradición, al final del festival se realizó el traspaso del testigo a la localidad que acogerá la edición del año siguiente.
En esta ocasión, fue el alcalde de Buñuel, Enrique Villafranca, quien cedió simbólicamente la responsabilidad a su homólogo de Murchante, Macario Jarauta, en un gesto que simboliza la continuidad y el compromiso con la cultura local.

Actuación conjunta, obsequios y merienda para cerrar el evento
El broche de oro llegó con una actuación coral de todos los joteros sobre el escenario, entonando una jota conjunta que emocionó al público.
Al finalizar, los participantes recibieron un obsequio y compartieron una merienda que sirvió para intercambiar experiencias y reforzar lazos entre intérpretes de diferentes generaciones.
Un festival que pone en valor la tradición oral y el legado musical
Más allá de la música, el Festival de Joteros y Joteras Veteranos representa un acto de transmisión cultural, en el que personas mayores comparten con nuevas generaciones su amor por la jota.
Buñuel ha sido este año un lugar de encuentro para recordar que la edad no es un límite, sino un valor añadido a la hora de interpretar una música que nace del alma.
Con la vista puesta en 2026, Murchante ya comienza a prepararse para recibir el testigo. Una cita que promete seguir consolidando esta tradición que, lejos de apagarse, encuentra en sus veteranos a sus mejores defensores.