Se ha detectado en Tudela recientemente una estafa telefónica que ha puesto en alerta a los vecinos de la ciudad.
Se trata de llamadas fraudulentas realizadas por individuos que se hacen pasar por proveedores de una conocida tienda de colchones de la capital ribera, ofreciendo un supuesto servicio de mantenimiento gratuito para los colchones.
El 'modus operandi' de estos estafadores implica contactar telefónicamente a los residentes, asegurando ser proveedores de una tienda local de confianza y proponiendo realizar un mantenimiento del colchón en sus hogares.
A pesar de las dudas de los afectados, quienes señalan que este tipo de servicio no es necesario, los estafadores persisten en su intento de concertar una cita, incluso ofreciendo visitas a domicilio.
Uno de los casos más preocupantes fue el de una persona mayor que recibió una de estas llamadas.
Los estafadores, tras verificar que se trataba de una persona de edad avanzada, intentaron programar una visita en su domicilio.
Afortunadamente, la hija de la víctima intervino a tiempo y contactó con la dueña de la tienda de colchones, quien confirmó que se trataba de una estafa.
Esta práctica, que ya ha sido reportada en otras regiones como Galicia, plantea un riesgo significativo para la seguridad y la privacidad de los ciudadanos.
Aunque no se trata directamente de un delito, constituye una forma de venta agresiva que, en última instancia, busca obtener beneficios económicos mediante la persuasión y el engaño.
Ante esta situación, se insta a la ciudadanía a estar alerta y a no caer en el engaño. Asimismo, se recomienda no proporcionar información personal ni aceptar visitas de desconocidos en el domicilio.
En caso de recibir una llamada sospechosa, se aconseja colgar el teléfono y, si es necesario, informar a las autoridades pertinentes.
Más casos en diferentes zonas de España
Este 'modus operandi' no es nuevo, ya que hace dos años, La Voz de Galicia publicó un caso similar al ocurrido ahora en Tudela.
En aquella ocasión, fue el hijo de una mujer de 80 años de la localidad de Campelo, en Poio, el que denunció la estafa de la desinfección de colchones.
Según relató al periódico gallego, el timo se gestó con una llamada telefónica en la que le ofrecieron la posibilidad de que se desplazara personal de su empresa para realizar de forma gratuita la desinfección de colchones de su vivienda.
La mujer aceptó y los estafadores concertaron una cita para el día siguiente. A su hijo le extraño tal ofrecimiento y comenzó a indagar hasta descubrir que esta modalidad de estafa surgió como consecuencia de la pandemia.
Por esta razón, decidió esperar al operario él mismo en la casa de su madre.
Tras recriminar a la persona que apareció en el domicilio su manera de actuar, le preguntó cómo había localizado el teléfono y la dirección su madre. Esta persona le respondió que "a través de una base de datos".
También intentó ponerse en contacto con el número de teléfono desde el que llamaron a su progenitora, pero este aparecía como apagado.
