Con motivo del seguimiento ordinario y exhaustivo que la Confederación Hidrográfica del Ebro (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico) realiza en materia de calidad de las aguas, se ha detectado una floración de cianobacterias en el embalse del Val.
En consecuencia, con lo observado, se procedió a la toma de muestras y posterior análisis, que ha sido realizado por personal experto en esta materia de la Universidad Autónoma de Madrid.
El resultado de estos análisis concluye que estas colonias de cianobacterias detectadas podrían contener algunas especies potencialmente tóxicas para la salud. Por ello, se ha informado de estos hechos a los ayuntamientos de la zona y a las autoridades competentes en materia de agua y salud pública.
Los abastecimientos, al no depender del embalse, no se verían afectados. Y en lo referente a las aguas para riego, éstas se seguirán suministrando exclusivamente del río Queiles entretanto se conoce nueva información sobre la evolución del episodio.
La duración media de este tipo de episodios es de unas semanas, por lo que el baño ha sido prohibido cautelarmente.
Por parte de este organismo, se ha dado orden al Servicio de Policía de Cauces para que continúe con la vigilancia y el seguimiento de este episodio.
Este hecho ha ocasionado que desde el Ayuntamiento de Tarazona se haya aconsejado, por seguridad y hasta nueva orden, no practicar la pesca y cualquier evento deportivo en las aguas del embalse de Santa Ana, dado que sus aguas se abastecen del embalse regulador del Val.
En este sentido, han informado a través de sus redes sociales que el organismo de cuenca va a proceder a analizar las aguas del embalse de Santa Ana para ver si se encuentran libres de bacterias.
