Esta madrugada falleció el Guardia Civil en situación de retiro, Fermín Garcés Hualde. Nacido en abril de 1929, a sus 93 años, recibiré sepelio hoy en Valtierra, su localidad natal.
Garcés fue le primer ciudadano en enfrentarse a los asesinos de ETA sin pensárselo dos veces, al presenciar el asesinato del joven Guardia Civil, José Antonio Pardines Arcay de 25 años, el 7 de junio de 1968, y convirtiéndose en todo un ejemplo de valentía y colaboración ciudadana.
ASESINATO DE PARDINES
Por aquel entonces, Fermín Garcés de 39 años, era camionero y volvía a España desde Francia cuando se topó con un control de carretera en Villabona (Guipúzcoa). En él, el joven Pardines, revisaba un vehículo que le resultaba sospechoso cuando uno de sus ocupantes le disparó y remató una vez que calló al suelo. Sería el primero de los crímenes perpetuados por la banda armada.
En ese mismo instante Garcés se enfrentó sin armas a los asesinos y los persiguió en su huida. La información detallada que propició Fermín Garcés a la Guardia Civil fueron claves para poder detenerlos.
Estos hechos cambiarían por completo su vida. Tras el incidente decidió dejar el camión y entrar a formar parte de la Guardia Civil, sirviendo al cuerpo hasta su jubilación.
Por su coraje y determinación el día del suceso, fue condecorado con la medalla al Mérito de la Guardia Civil con Distintivo Rojo.
