Siguiendo una arraigada tradición, los pueblos de Arguedas y Cadreita peregrinaron juntos este lunes de Pascua hasta la ermita de la Virgen del Yugo, situada en el término municipal de Arguedas.
La romería congregó a un gran número de vecinos de ambas localidades, además de diversas autoridades forales, entre las que se encontraban el diputado Alberto Catalán, el alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, la alcaldesa de Castejón, Noelia Guerra, el alcalde de Valtierra, Manolo Resa, la alcaldesa de Cortes, Conchi Ausejo, y el presidente de la comunidad de Bardenas, José María Agramonte.
Un legado histórico y cultural
La devoción a la Virgen del Yugo se remonta a finales del siglo XI, según cuenta la leyenda que la Virgen se apareció "al cojo de Arguedas" durante la siesta.
Ante la incredulidad general, el cojo regresó al lugar de la aparición y la Virgen lo curó de su enfermedad. Este milagro convenció a los vecinos de la veracidad de la aparición y dio origen a la romería.
Símbolo de unión entre dos pueblos
El alcalde de Arguedas, José Luis Sanz, expresó su satisfacción por vivir su primera romería como alcalde y destacó "el gran cariño y devoción que esta tradición representa para Arguedas".
Por su parte, la alcaldesa de Cadreita, Berta Pejenaute, subrayó que "este acto es una tradición que muestra la buena vecindad histórica que tienen Cadreita y Arguedas".
La romería se desarrolló en un ambiente festivo y religioso, con cánticos, rezos y una misa oficiada en la ermita.
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