Toquero ratifica el cierre de la exposición de LAB y el sindicato denuncia censura
- Los motivos del cierre
- LAB rechaza la decisión y denuncia censura
- Un conflicto con trasfondo político y social
El Ayuntamiento de Tudela ha ratificado este martes, 7 de octubre, la medida provisional de suspensión de la exposición del sindicato LAB que se encontraba en el centro cívico Rúa.
La muestra, dedicada a repasar la historia del sindicato, fue clausurada el pasado sábado 4 de octubre tras detectarse imágenes que, según el consistorio, “podrían suponer exaltación del terrorismo”.
La resolución de Alcaldía, firmada por Alejandro Toquero, confirma el cierre adoptado el fin de semana “para garantizar que no se continúa con la incitación a la violencia y la posible exaltación del terrorismo”.
Además, el documento ordena la apertura de un expediente sancionador por infracción grave contra el sindicato LAB, al entender que la exposición se desvió de los fines autorizados para el uso del espacio municipal.
Los motivos del cierre
En el expediente se especifica que, durante la instalación de la exposición, se detectaron dos imágenes: una fotografía del exdirigente sindical Jon Idigoras con el mensaje “Ion askatu”, y un cartel de manifestación con referencias a la alternativa K.A.S y pancartas en favor de la amnistía de presos y refugiados.
Según la Alcaldía, estas imágenes “ocasionan sufrimiento gratuito a las víctimas del terrorismo y suponen una clara incitación a la violencia”.
El Ayuntamiento se apoya en el artículo 39.3 de la Ordenanza Reguladora de Centros Cívicos, que impide introducir en estos espacios símbolos, emblemas o leyendas que puedan incitar a la violencia o discriminación.
Además, considera que el contenido exhibido excede los fines para los que se autorizó el uso del centro cívico Rúa.
La resolución también prevé una posible sanción de un mes de retirada del derecho de uso de los equipamientos municipales. El sindicato dispone ahora de quince días para presentar alegaciones y puede interponer recurso de reposición, alzada o contencioso-administrativo.
La resolución ratifica la suspensión decretada el sábado y abre expediente sancionador para garantizar el cumplimiento de la normativa de centros cívicos.
LAB rechaza la decisión y denuncia censura
El sindicato LAB ha criticado duramente la decisión del Ayuntamiento y ha acusado al alcalde Toquero de aplicar una “censura política e ideológica”.
En un comunicado, el sindicato defiende que la exposición —titulada 1974tik etorkizunera LAB zabaltzen— tiene un carácter histórico y fue previamente autorizada por el Consistorio.
La muestra ya se había exhibido en el Parlamento de Navarra el pasado mes de febrero, con motivo del 50 aniversario del sindicato, sin incidentes ni objeciones.
LAB asegura que el cartel al que hace referencia el Ayuntamiento es solo una reproducción histórica dentro de un conjunto de decenas de imágenes y niega que la exposición tuviera contenido político o de exaltación.
“El Ayuntamiento ha inventado que la exposición se llama Jon askatu!, cuando ese texto pertenece a un pequeño cartel histórico entre decenas de reproducciones”, ha afirmado LAB, que acusa a Toquero de actuar por motivos ideológicos y de vulnerar la libertad de expresión.
Un conflicto con trasfondo político y social
LAB recuerda que la exposición se organizó para visibilizar sus 40 años de actividad sindical en la Ribera de Navarra y que la autorización municipal se concedió meses atrás. Critica, además, que el cierre se comunicara “por la prensa antes que por los cauces oficiales”.
Por su parte, el Ayuntamiento sostiene que la medida responde al deber de garantizar la neutralidad institucional y evitar cualquier mensaje que pueda interpretarse como una ofensa a las víctimas del terrorismo.
La ratificación de hoy consolida la decisión adoptada el sábado y mantiene el cierre de la exposición hasta que se resuelva el procedimiento sancionador.
El caso ha generado un intenso debate político y social en Tudela sobre los límites de la libertad de expresión y la gestión de los espacios públicos municipales.
Mientras el Consistorio defiende su actuación por motivos legales, LAB insiste en que se trata de un acto de censura “contrario a los valores democráticos”.