CASTEJÓN

Atacan en Castejón un mural artístico pro Palestina

Un mural pro Palestina en Castejón sufre un ataque vandálico
La asociación Yala Nafarroa denuncia el ataque y asegura que la obra será restaurada como símbolo de resistencia

La asociación Yala Nafarroa por Palestina Ribera ha denunciado públicamente la "agresión fascista y sionista" sufrida por un mural solidario realizado en el municipio de Castejón.

La obra, de carácter artístico y reivindicativo, formaba parte de las actividades impulsadas por la iniciativa Ibaitik Itsasora – “Desde el río hasta el mar” – que recorre Navarra en defensa del pueblo palestino.

Un mural artístico como denuncia y solidaridad

El mural fue creado por una comisión local como aporte cultural y político dentro de las actividades de la marcha que conecta Tudela con Hendaia. Su objetivo era visibilizar la situación en Palestina y denunciar las complicidades internacionales frente "al genocidio y el apartheid israelí".

Según la denuncia, la obra fue atacada con mensajes ofensivos de carácter fascista y sionista. Este acto ha sido interpretado por la asociación como un intento de silenciar las expresiones artísticas solidarias que se están desarrollando en Navarra y la Ribera.

La respuesta de las autoras

Las artistas responsables del mural han asegurado que ya están organizando su restauración. Han señalado que el ataque no impedirá que la obra vuelva a lucir en las calles de Castejón, reafirmando así la resistencia cultural como herramienta de denuncia.

“Cada borrado o agresión solo nos da más fuerza para seguir pintando y defendiendo la memoria de Palestina”, han expresado en un comunicado.

Un gesto dentro de una marcha internacional

La iniciativa Ibaitik Itsasora inició su recorrido el pasado 10 de septiembre desde Tudela, en la ribera del Ebro. Su meta está fijada en Hendaia, donde concluirá el día 20, tras recorrer decenas de localidades y sumar a miles de personas comprometidas con la causa palestina.

Durante su trayecto, la marcha ha incluido actividades culturales, charlas, concentraciones y la realización de murales como el de Castejón. Estas intervenciones artísticas han sido pensadas como símbolos de denuncia social y de unión entre territorios en solidaridad con Palestina.

Denuncia contra la ocupación y el genocidio

Las organizaciones participantes señalan que la agresión sufrida por el mural es una muestra de la polarización que generan estas expresiones de apoyo. Sin embargo, aseguran que la iniciativa no se detendrá y que el arte seguirá siendo un vehículo de resistencia.

La marcha busca visibilizar las consecuencias de la ocupación israelí y exigir el "fin del genocidio contra el pueblo palestino". Asimismo, se pretende subrayar la complicidad de gobiernos y empresas en este proceso, llamando a la responsabilidad internacional.

Un movimiento con amplia participación

Ibaitik Itsasora cuenta con la implicación de miles de ciudadanos y ciudadanas que, a lo largo de sus etapas, han mostrado su apoyo mediante diferentes formas de movilización. La marcha ha conseguido unir en un mismo recorrido a colectivos sociales, asociaciones culturales, sindicatos y activistas de distintas generaciones.

La agresión al mural, lejos de debilitar la iniciativa, ha provocado una reacción de mayor apoyo social, generando un efecto contrario al buscado por quienes perpetraron el ataque.

La restauración del mural en Castejón se convertirá en un nuevo acto de resistencia cultural dentro de la marcha Ibaitik Itsasora.

La Ribera, escenario de solidaridad

La Ribera de Navarra, y especialmente localidades como Tudela y Castejón, han sido puntos clave en el desarrollo de actividades de solidaridad. El mural forma parte de un entramado de expresiones culturales que buscan mantener viva la memoria y la denuncia.

Desde la asociación Yala Nafarroa se insiste en que este tipo de agresiones no deben desanimar a la población, sino reforzar la importancia de defender los espacios públicos como escenarios de libre expresión.

Con la restauración ya en marcha, la obra artística en favor de Palestina volverá a ocupar un lugar central en la vida cultural de Castejón, convirtiéndose en recordatorio de que el arte y la solidaridad pueden resistir frente a la intolerancia.