Lucas Tripodi se despide del Tudelano Ribera Navarra: “Jugar en la Caldera es especial”
- Sensaciones agridulces en una etapa difícil
- Afición y vestuario, clave en los peores momentos
- Una temporada de dos caras
- El desafío japonés: más exigencia, más ilusión
- Agradecido a la afición y al Tudelano Ribera Navarra
“Jugar en la Caldera es especial, porque da igual el rival que venga, que no sé por qué, pero te creés que le podés ganar a cualquiera, y eso solamente lo genera esta cancha”. Con esta frase cargada de emoción, Lucas Tripodi (18-06-1994) resume lo que ha significado para él el ATP Iluminación Tudelano Ribera Navarra. El ala argentino pone punto final a su ciclo en el club ribero tras cuatro temporadas repartidas en dos etapas (2018-2020 y 2023-2025) para emprender una nueva aventura profesional en el Nagoya Oceans, uno de los clubes más potentes de Asia.
Sensaciones agridulces en una etapa difícil
Antes de poner rumbo a Japón, Tripodi compartió sus sensaciones sobre esta segunda etapa, marcada por dos temporadas muy complicadas en lo deportivo. “La verdad es que es un poco agridulce, porque, obviamente, cuando terminás una etapa, si te encontrás bien, feliz y a gusto, es difícil. Pero más que triste por irme, estoy feliz por el paso en el club y por lo que puedo llegar a dejar”, afirmó.
Afición y vestuario, clave en los peores momentos
Tripodi vivió dos años muy diferentes a los de su primera etapa, en la que el equipo peleó por cotas altas. “Nos tocó disfrutar mucho y ganar mucho en mis primeros dos años en el club, entonces se hace todo más fácil. Estas dos temporadas destaco a la afición y al vestuario, porque fueron dos factores importantísimos en momentos muy difíciles. Cuando peor se creía que estábamos, la gente más estaba con nosotros y el vestuario más unido estaba”.
La permanencia se logró en ambas campañas tras un gran esfuerzo colectivo, aunque quedó la espina de no poder luchar por metas más ambiciosas. “Me voy con esa sensación, no porque puedan llegar a ser un equipo mejor, sino porque creo que teníamos dos equipos buenos en las dos temporadas. Mi sensación personal es que nos debíamos más a nosotros”.
Una temporada de dos caras
Sobre la difícil primera vuelta de esta temporada, el argentino considera que el equipo se confió tras el buen inicio. “Ganamos en Noia y quizás nos confundimos todos. Cuando te querés dar cuenta ya llevás cinco o seis partidos perdiendo. Después es difícil salir. Los fichajes de invierno nos dieron un salto de calidad y el grupo entendió que había que tirar todos para el mismo lado”.
El desafío japonés: más exigencia, más ilusión
Pese a tener ofertas de otros clubes españoles, Tripodi eligió el reto internacional. “Tenía ofertas de España y nunca las valoré, sinceramente, porque acá yo estoy muy bien, mi familia está muy bien. Pero en el momento que las cosas se enderezaron un poco, empecé a ver el futuro. Fue difícil, pero prefiero terminar esta etapa así, con una experiencia que tenía ganas de vivir”.
Nagoya Oceans, su nuevo destino, representa un desafío deportivo de primer nivel. “Es un club súper serio, aspirante a ganar todo. La exigencia vuelve a ser mucho más alta, porque es un club que se maneja por títulos. Me motivó que apuesten fuerte por mí y tengo la ilusión y las ganas de volver a ganar títulos”.
Agradecido a la afición y al Tudelano Ribera Navarra
Tripodi se marcha agradecido y emocionado, consciente del cariño recibido por parte de la afición tudelana. “Solo le puedo agradecer a la gente y al club. Cuando salí de Movistar Inter, las ofertas que tenía preguntaban cómo estaba de la rodilla. Y acá no dudaron. Me cuidaron desde el primer día, me hicieron sentir querido y feliz. Y eso no lo olvidaré nunca”.